A favor o en contra de… Decir «TE QUIERO»

Por Jess Waldorf

i-love-you-2232164_960_720

Hay muchos “te quieros” diferentes, algunos expresan cariño, otros necesidad y muchos amor. De cualquier forma, estas dos palabras que existen en cualquier idioma, son la forma universal de expresarle a alguien que le amas, y por eso, hay quien puede pensar que ser el primero en la relación en decirlo supone “perder”, o que no hace falta expresarlo a menudo porque “pierde significado” o simplemente que para qué se lo vas a decir a tus padres “si ya se sabe”. Se trata de 8 letras que más allá de sus connotaciones, tienen todo un sistema de creencias añadidas, diferentes para cada persona, no sólo en la misma cultura sino en la misma familia. ¿Por qué dos hermanos pueden ser tan distintos a la hora de pronunciarlas? ¿Hay realmente un momento idóneo para decírselo a tu nueva pareja? ¿Es una muestra de vulnerabilidad? ¿Puede llegar a cansar?¿Si no se expresa es que no se siente? Hay un sinfín de preguntas sin respuesta sobre el tema, por lo que… ¡allá vamos! 

EL «TE QUIERO» EN LA FAMILIA

“La sangre te hace pariente, pero la lealtad te hace familia”, “no importa lo pobre que seas, si tienes familia eres rico”, “lo importante de una familia no es vivir juntos sino estar unidos”… y así hasta el infinito. Cientos de dichos o frases sobre la familia, pero un nexo en común; se necesita algo más que simplemente el parentesco para ser una FAMILIA. Llamémosle, aprecio, amor, comprensión… o simplemente saber que si el mundo entero te deja de lado, ellos estarán allí.

family-2611748_960_720

Obviamente ni en todas las familias reina la cordialidad y el buen rollo, ni en las que sí, esto se mantiene invariable en el tiempo, por eso da un poco de pena ver que, en general, somos muy rápidos para echar cosas en cara y enfadarnos, y no tanto para pedir perdón o decir «TE QUIERO».

Hay familias en las que quizá en toda su vida nunca lo digan y otras en las que se dice casi a diario… ¿De qué depende? Supongo que en gran parte te influye lo que has visto en casa (si estas acostumbrado a ver a la gente de tu alrededor hacerlo como algo natural, a ti te costará menos), y también cómo seas tú.

Entendido y aceptado; que no lo digas NO SIGNIFICA que no lo sientas, del mismo modo que no solo llorando se expresa tristeza. Aún así, aunque seas la persona que menos cómoda se siente diciendo te quiero, o aunque ni veas la necesidad, creo que hay momentos, unos pocos en tu vida, en los que tu familia, tu gente, se merece oírlo. Como cuando te despides en el aeropuerto antes de un largo viaje o cuando alguien está enfermo. Y si no lo dices, no pasará nada, porque lo importante en el fondo es demostrarlo, y muchas veces una mirada, un abrazo de esos “toca almas” expresan por ti lo que a veces tu boca no puede.

EL «TE QUIERO» EN LA PAREJA

Nos cuesta muuuuuucho menos decírselo a nuestro novio/a. ¿Por qué? Supongo que el enamoramiento es el causante de que casi de forma súbita, empieces a sentir un chorro de amor desbocado hacia tu pareja. Es una sensación diferente, porque mientras que a tus familiares les quieres de una forma “consistente” y menos “descontrolada”, a él/ella, empiezas a adorarle lentamente, y llega un día en el que sientes que casi sería posible que te estallase el corazón de lo que le quieres. Y esa sensación… es difícil de disimular. No sólo se te nota, sino que NECESITAS decirlo. Resístete unos días, hazte el valiente… pero ¡caerás!, te lo garantizo. Es como si te quemase algo por dentro, como si no fuese justo estar sintiendo todo eso y no hacer feliz al otro al hacérselo saber.

article-2609348_960_720

¿El primero que lo dice pierde? Pues supongo que según funcione lo vuestro… si es una competición, un tira y afloja, entonces sí, pierdes. Pero, ¡joder! Ojalá “pierda” yo así, ojalá el mayor mal de la tierra fuera el enamorarte de alguien pero tener que esperar para decir las 2 palabras mágicas hasta que el otro las diga primero. Tampoco quiero decir que haya que decirlo sin PENSARSELO UN POCO. Sobre todo porque:

  • No debes pronunciarlo en vano.
  • No vas a poder retractarte, una vez que se escaparon de tus labios… ale, ya se fueron, están ahí fuera, con sus repercusiones.
  • Va a suponer un IMPACTO en la persona que las recibe por primera vez. Si crees que esa persona no está preparada para oírlo, y tu no quieres que le puedan suponer agobio… Espera. Ya te llegará el momento.
  • Probablemente hagas MUY FELIZ a alguien. Por lo que no lo digas en el primer subidón postcoital que tengáis. Asegúrate de que sientes cada una de esas 8 letras mágicas.

Frecuencia con la que se dice

 Este es otro punto “comprometido”. Seguramente conoces a parejas que lo usan constantemente, incluso a modo de despedida, como sustitutivo de “hasta luego”, otras que se lo dicen una vez al año, probablemente en su aniversario, y otras que según les apetezca.

Hay que tener cuidado. ¿Por qué? Pues porque se sienta un PRECEDENTE. Si es un ritual decírselo cada una de las noches que habláis antes de acostaros y una noche no lo dice uno de los dos… ¡ECATOMBE! Y, por el contrario, también puede ser una posible manera de “medir” la relación. Si seguimos diciéndonoslo, será que estamos bien.

Por supuesto, que cada uno, cada pareja, decida. Yo, personalmente, voto y abogo porque el TE QUIERO en la pareja no sea una OBLIGACIÓN, ni una muletilla. Que se diga cuando realmente se sienta, cuando notes que QUIERES decírselo, y no porque TENGAS QUE HACERLO. Y que si quieres decírselo 20 veces al día sea estupendo, pero si un día no lo dices no se acabe el mundo.

DIGAMOS MÁS, “TE QUIERO”

Quiero concluir el post así, haciendo una especie de llamamiento. Reivindicando el derecho de la gente de tu alrededor a recibir este pedazo de regalo de oírte decirles que les quieres. Porque el mundo ya es bastante malo, ya suceden demasiadas desgracias, y si en medio de un puto día gris de esos, alguien recibe este regalo, algo tan sencillo como esto, joder, hagámoslo. Cubramos el mundo de te quieros, y así quizá haya menos espacio para los odios, para la miseria, la depresión y el rencor. Si lo sientes, dilo, y ya habrá en este mundo, aunque solo sea por un instante, 2 personas felices, el que lo recibe y el que lo da.

heart-1450361_960_720

Jess WaldorfAutor: Jessica Waldorf
Profesora que no para de aprender. Viajando por este mundo con un solo objetivo; ¡ser lo más feliz posible!

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s