No dejes que el #miedo controle tu vida. Sé libre

Mañana puede ser tu último día y sólo tú puedes decidir cómo quieres vivir tu vida. ¿Con miedo? ¿De verdad? Imagina que fuera el último día de tu vida, ¿lo pasarías encerrado en casa POR MIEDO? La vida son dos días y más vale disfrutarlos. En Bruselas estamos en alerta máxima de ataque terrorista. La gente tiene miedo, pero párate a pensar: los terroristas quieren pillarte por sorpresa, ahora no lo van a hacer. ¡VIVE!

Sueña sin miedo

Según Anonymus vamos a estar en peligro durante los próximos seis meses, ¿te vas a encerrar en casa? Yo estuve el sábado entero en casa, básicamente por dos razones:

1. Se lo prometí a mi familia porque estaban asustados con las imágenes de los medios de comunicación.
2. Porque estaba TODO cerrado. Era una ciudad desierta, así que tampoco había mucho que hacer.

El domingo me levanté agobiada. Soy una persona casera, pero si me obligan a estar en casa es como encerrarme en una cárcel. No way! Mis compañeras de piso pensaban que estaba loca porque les dije que me iba a Brujas y fui. Sigo viva y me lo pasé pipa. Lo necesitaba. Si nos quedamos todos en casa, los terroristas consiguen su objetivo: aterrarnos, paralizar nuestras vidas. Puedes morir cualquier día, pero YO, mientras esté viva, disfrutaré de cada segundo.

¿Por qué mañana puede ser tu último día?

No importa dónde vivas o dónde trabajes. Si en tu ciudad hay amenaza de atentado o no. ¿Quién te dice que no te puede dar un ataque al corazón o resbalarte y golpearte en la cabeza en la comodidad de tu casa? ¡A mi me ha pasado! (Doña torpa al habla)

Mi caída versión Matrix

El domingo fui a Brujas y me lo pasé genial. SIMPLEMENTE. Volví a casa y todos estaban alarmados, porque, por orden de la policía, teníamos que cerrar puertas y ventanas. Yo iba a ir a trabajar el lunes como cualquier otro día y mis compañeras de piso casi me suplicaban que no fuera porque iban a poner una bomba en la Comisión. Está claro que el miedo ciega al juicio. Yo lo tenía claro: si mi trabajo estaba abierto, yo iba a ir a trabajar. No voy a limitar mi vida por miedo.

¿Qué me pasó? Lo más sencillo del mundo. Una de esas cosas que nos puede pasar a cualquiera. Claro, los torpes y torpas como yo tienen más posibilidades. Me levanté a medianoche y bajé al baño medio dormida. Vivo en una casa típica belga, así que hay escaleras para arriba y escaleras para abajo. Al salir del baño tengo que bajar unas escaleras, me resbalé y ¡ZAS!, un golpetazo en la espalda de cuidado.

No podía moverme. Vinieron a socorrerme y tenía a una persona hablándome en inglés y otra en francés. No era capaz de articular palabra y menos en otro idioma. Solo pensaba: ‘por favor, que no me haya roto nada’. Me levantaron, me pusieron hielo…y al día siguiente fui al hospital y me pusieron dos inyecciones. El médico me mandó tres días de reposo en la cama, así que parece que a mí también me toca estar encerrada en casa, pero vaya, en cuanto me sienta un poco mejor…I am out! Mi columna está bien, pero fácilmente podría haberme golpeado la cabeza o la columna…así que, no pienses que por estar en casa estás más seguro. Si algo tiene que pasarte, te pasará, estés donde estés, así que disfruta de la vida mientras puedas.

CONCLUSIÓN: Espero que este pequeño ejemplo os haya servido para daros cuenta de que no podemos vivir con miedo y limitar nuestras vidas. No os pido que seáis camicaces. Si ves a alguien con una bomba, no corras hacia él; pero no dejes de vivir tu vida porque A LO MEJOR hay un atentado.

PD: Estoy harta de oír que el miedo es libre, por favor, que alguien le detenga. El miedo es la mayor incapacidad de todas.

Por si a mí no me creéis, os dejo un video de Rafael Santandreu: